Puerto Retiro, el nuevo destino foodie

A pocos pasos del puerto y lejos del caos del microcentro, Puerto Retiro se está convirtiendo en un polo que combina desarrollo, arte y propuestas gastronómicas de nivel. Oficinas modernas, edificios residenciales y espacios culturales conviven con bares y restaurantes que le dan identidad propia.

En este contexto, el Grupo Aldo's junto a Almarena Meliá Puerto Retiro apostaron por abrir Áncora, un restaurante pensado como punto de encuentro para quienes buscan comer bien en un ambiente relajado y con estilo.

Un estilo clásico con alma portuaria

Ubicado en el Pasaje Pedro Zanni, Áncora logra un equilibrio perfecto entre lo tradicional y lo actual. Madera, manteles blancos, luz natural y guiños al puerto crean un espacio atemporal que invita a quedarse.

Su capacidad para 60 personas lo hace íntimo y acogedor, ideal para una comida tranquila. El nombre, que en italiano significa "ancla", refleja su esencia: un lugar para detenerse, disfrutar y reconectar con sabores de siempre.

Sabores del Río de la Plata con un toque casero

En la cocina, los chefs Ana Ortuño, Leo Azulay y Fabrizio Drommi reinterpretan la tradición rioplatense con técnicas actuales y mucha dedicación artesanal.

Entre las entradas, la pascualina artesanal con masa fina es puro homenaje a la cocina de casa. Entre los platos principales, brillan los pappardelle caseros con estofado de carne al hueso, el revuelto gramajo, el ojo de bife con puré de coliflor y salsa criolla, y el chivito uruguayo con papas rejilla y pan hecho en el restaurante.

Para los que aman el dulce, hay flan con dulce de leche y crema, almendrado con praliné y mousse de chocolate con guiños a la infancia.

De la mañana a la noche

Áncora abre temprano para quienes buscan un buen café y algo rico para empezar el día: medialunas rellenas, tostadas con mermeladas caseras, yogur con granola.

Al mediodía, el menú ejecutivo ofrece opciones pensadas para quienes trabajan en la zona, sin sacrificar calidad ni sabor. Por la noche, el ambiente se vuelve más íntimo, ideal para una cena relajada.

Vinos de autor y cócteles clásicos

La carta de vinos, curada por Aldo Graziani, se enfoca en bodegas independientes como Zaha, Riccitelli y Antro. Hay opciones por copa, espumantes y hasta blancos naranjos para quienes buscan algo diferente.

La barra también tiene su protagonismo: Negroni, Old Fashioned y cócteles frescos para acompañar las noches porteñas.