Un rincón oculto a metros del Barrio Chino

Si caminás por Olazábal 1627 vas a pensar que te equivocaste. El local parece cerrado, con sillas sobre las mesas y sin ningún cartel que indique que ahí se sirve uno de los sushi libres más originales de Buenos Aires. Pero si te animás a mirar por el vidrio, vas a ver a Omar, el encargado que abre la puerta del misterioso restaurante escondido detrás de esa fachada.

Para llegar a Yuki, hay que atravesar un salón discreto y subir al primer piso, donde el ambiente cambia por completo. A la derecha, un sushiman trabaja sin parar; al frente, una cinta transportadora en movimiento constante recorre las 19 mesas del lugar. Así empieza la experiencia Kaiten Sushi más secreta de la ciudad.

La magia del Kaiten Sushi: cuando la comida viene a vos

En Yuki el concepto es simple pero irresistible: si vos no vas a la comida, la comida viene a vos. La cinta transportadora no se detiene nunca, ni siquiera cuando hay que reponer platos. Va girando sin parar con opciones que cambian a cada instante, listas para que las agarres cuando pasen por tu mesa.

En la parte superior circulan platos calientes, mientras que la parte inferior se reserva para las preparaciones frías. Entre las opciones más tentadoras hay sushi fresco en muchas variedades, tofu, ensaladas, platos de verduras, carnes y pescados, e incluso ramen los fines de semana.

Y no todo termina en el sushi: también hay postres que se suman a la cinta, desde clásicos orientales hasta delicias porteñas como la chocotorta, perfecta para cerrar la comida con un toque dulce.

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Sushi libre en Buenos Aires con un estilo diferente

A diferencia de otros restaurantes en Buenos Aires, Yuki propone una experiencia relajada, divertida y dinámica. Podés sentarte con amigos y dejarte sorprender por los platos que van apareciendo frente a vos.

La propuesta es de sushi libre, lo que significa que podés comer todo lo que quieras durante una hora y cuarto, tiempo pensado para que todos los comensales puedan disfrutar de la experiencia sin esperas largas.

Además del salón principal, Yuki cuenta con una barra y un jardín ideal para las noches cálidas: perfecto para tomar un trago mientras esperás una mesa o simplemente para seguir disfrutando del ambiente.

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Un festín en movimiento: platos fríos, calientes y ramen

La cinta transportadora de Yuki es un desfile constante de sabores. Entre las especialidades frías se destacan las piezas de sushi y sashimi recién hechos, el tofu y diferentes tipos de ensaladas frescas.

En el lado caliente, la propuesta incluye platos elaborados con verduras, carnes y pescados, y cada fin de semana se suma el clásico ramen japonés, ideal para acompañar las piezas de sushi.

Este sistema no solo hace que la experiencia sea entretenida y dinámica, sino que también garantiza la frescura: los platos se reponen constantemente y llegan directamente desde la cocina a tu mesa.

Postres en la cinta y un final dulce inesperado

Una de las sorpresas más divertidas de Yuki es que incluso los postres circulan por la cinta. Después de probar diferentes piezas de sushi y platos calientes, podés cerrar la comida con una porción de chocotorta u otras opciones dulces que van apareciendo sin previo aviso.

Es una forma lúdica y distinta de terminar la cena, fiel al espíritu informal y divertido que caracteriza a este rincón escondido de Belgrano.

Horarios, precios y cómo encontrar Yuki

Encontrar Yuki forma parte de la experiencia. Tenés que dirigirte a Olazábal 1627, en Belgrano, a pocos metros del Barrio Chino, y animarte a entrar al local que parece cerrado. Si ves a Omar, estás en el lugar correcto.

El restaurante abre:

• Martes a viernes de 19:30 a 23:30.

• Sábados, domingos y feriados de 12:00 a 16:00 y de 19:30 a 23:30.