Un infaltable de la gastronomía porteña

En una ciudad repleta de bodegones históricos y pizzerías notables, La Mezzetta se mantiene firme como uno de esos lugares que definen qué es comer en Buenos Aires. Ubicada en Álvarez Thomas 1321, en pleno Villa Ortúzar, esta pizzería funciona desde 1939 y conserva un estilo que ya es marca registrada: acá no hay mesas ni sillas, solo una barra donde se comen las porciones recién salidas del horno, como manda la tradición porteña.

Ese detalle, lejos de ser un obstáculo, es parte del encanto. Es el ritual: pedir, apoyar el codo en la barra, sostener el pedazo de muzza bien cargado y disfrutar. La postal favorita de turistas, vecinos y fanáticos de la pizza al molde.

Cuánto cuesta una pizza en La Mezzetta en noviembre

Para quienes buscan dónde comer en Villa Ortúzar sin gastar una fortuna, este clásico sigue ofreciendo precios competitivos considerando su fama, su historia y sus porciones generosas.

Estos son los valores de noviembre de 2025:

• Pizza grande de muzzarella: $15.500

• Pizza chica de muzzarella: $11.700

Otras opciones del menú, todas fieles al estilo de la casa:

• Jamón y morrones: $23.500

• Napolitana: $19.500

• Fugazza: $11.500

• Fugazzeta: $28.000

• Fugazzeta rellena: $27.500

• Anchoas: $15.500

Todo en línea con la situación económica actual, pero aún accesible para quienes buscan clásicos auténticos dentro del circuito de restaurantes en Buenos Aires.

Un ícono que no pierde su magia

Con más de ocho décadas de historia, La Mezzetta logró algo que no todas las pizzerías pueden sostener: mantener el espíritu original sin volverse museo. Su ambiente popular, la atención al paso y ese aroma que se siente incluso antes de llegar a la puerta forman parte de la experiencia.

El lugar es un punto obligado tanto para quienes viven en la zona como para quienes recorren la ciudad buscando joyas tradicionales de la gastronomía porteña.

Un plus dulce para cerrar la visita

Aunque la muzza sea la estrella, el local también ofrece postres caseros que siguen la misma línea histórica: torta de ricota, pasta frola y torta de dulce de leche. Opciones simples, clásicas y con ese toque de pizzería familiar que casi no existe en otros barrios.

Son esos detalles los que hacen que La Mezzetta no sea solo "una pizzería más", sino parte del ADN gastronómico porteño.

Un pedazo de Buenos Aires que sigue vivo

Entre tantas aperturas modernas y propuestas gourmet que aparecen cada mes, La Mezzetta demuestra que los clásicos no pasan de moda. Con precios razonables, una identidad firme y un formato que desafía el tiempo, este local sigue siendo uno de los lugares más auténticos para comer en Buenos Aires.

Si buscás una parada bien porteña y sin vueltas, este es el tipo de rincones que hacen que la ciudad se siga disfrutando por una porción... y por la historia que viene con ella.