Parque Nacional El Rey: la joya escondida de Salta

Argentina es un país de contrastes y sorpresas. Más allá de los destinos turísticos más visitados, existen rincones que permanecen casi vírgenes, esperando a ser descubiertos por quienes se animan a ir más allá del circuito tradicional. Uno de ellos es el Parque Nacional El Rey, ubicado al sureste de la provincia de Salta, a unos 197 kilómetros de la capital provincial.

Este parque, poco conocido incluso por los propios argentinos, es una invitación a reconectar con la naturaleza en su forma más pura. Con clima cálido subtropical, una biodiversidad única y paisajes casi intactos por la mano del hombre, El Rey ofrece una de las experiencias ecoturísticas más auténticas del norte argentino.

Naturaleza, historia y aventura en un solo lugar

Creado en 1948, el Parque Nacional El Rey protege una de las regiones ecológicas más ricas del país: la transición entre las Yungas y el Chaco Serrano. Esta característica lo convierte en un refugio para una enorme variedad de flora y fauna, donde es común avistar tapires, pecaríes, corzuelas, monos caí y hasta cóndores andinos en pleno vuelo.

El parque debe su nombre a la antigua finca ganadera "El Rey", que perteneció al coronel Juan Adrián Cornejo, un patriota salteño que fue condecorado por la Corona española. Hoy, entre la vegetación exuberante y los caminos de tierra, todavía se pueden encontrar vestigios de esa historia, lo que le da un plus cultural al paseo.

Qué hacer en el Parque Nacional El Rey

Este destino es ideal para quienes disfrutan de la aventura y el turismo de naturaleza. Algunas de las actividades más destacadas son:

• Trekking y senderismo por caminos que atraviesan montes, quebradas y bosques nubosos.

• Avistaje de fauna y flora, con binoculares en mano, para quienes disfrutan observar animales en libertad.

• Cabalgatas guiadas, que permiten explorar zonas más profundas del parque.

• Ciclismo y escalada, en sectores específicos del área protegida.

• Camping en áreas habilitadas, bajo un cielo lleno de estrellas y rodeado por el canto de los pájaros.

Una de las grandes ventajas de este parque es que, a diferencia de otros destinos del norte como Cafayate o Cachi, no está masificado. Sus senderos son solitarios y silenciosos, perfectos para quienes buscan alejarse del ruido y conectar con el entorno.

Cómo llegar y cuándo ir

Desde la ciudad de Salta, se debe tomar la Ruta Nacional 34 hasta la localidad de Lumbreras. Desde allí, comienza un camino de ripio de unos 60 kilómetros que serpentea entre montes y quebradas hasta llegar al acceso del parque. Si bien el trayecto final puede ser un poco desafiante, el esfuerzo vale la pena.

La mejor época para visitar El Rey es entre abril y octubre, cuando las lluvias son menos frecuentes y los caminos están en mejores condiciones.

¿Por qué elegir El Rey en tu próximo viaje?

Porque es una aventura distinta. Porque es posible caminar horas sin cruzarse con otro viajero. Porque la fauna aparece a cada paso y los paisajes parecen detenidos en el tiempo. Porque es un lugar que combina naturaleza, historia y tranquilidad como pocos.

En definitiva, el Parque Nacional El Rey es ideal para turistas que buscan salirse del mapa tradicional y explorar lo más profundo del norte argentino. Si tu estilo de viaje incluye una mochila, ganas de caminar y el deseo de descubrir lugares únicos, este parque es para vos.