La Uribeña: entre salchichas alemanas, cerveza artesanal y espíritu criollo

Uribelarrea ya es una joya turística en sí misma. Este encantador pueblo rural del partido de Cañuelas, con calles de tierra, casas antiguas y una mística que invita a bajar un cambio, se transformó en el destino ideal para una escapada de fin de semana. Pero dentro de ese entorno relajado y pintoresco, hay una parada obligatoria para los amantes de la buena comida: La Uribeña.

Este restaurante de campo y fábrica de cerveza artesanal está ubicado en el acceso principal al pueblo, sobre la Avenida Valeria de Crotto 899, y abre de jueves a domingos y feriados. Su estética es inconfundible: un bodegón tradicional decorado con reliquias, botellas antiguas, fotos y guiños a íconos de la cultura popular argentina como Maradona, Tato Bores y Alberto Olmedo.

Menú alemán con corazón argentino

Lo que distingue a La Uribeña no es solo su ambientación, sino su propuesta culinaria: una fusión de sabores alemanes y cocina criolla, ideal para compartir en grupo y maridar con cervezas tiradas, todas elaboradas en el lugar.

Su Menú Alemán es la estrella para los que buscan algo distinto: una tabla abundante con salchichas tipo Frankfurt, panceta, rosca polaca, carne, chorizo colorado, chucrut y papas naturales. También se puede pedir la clásica salchicha Frankfurt con chucrut y panceta, que llega a la mesa con ese aroma irresistible a cocina centroeuropea, pero con un entorno que grita "Pampa Argentina".

¿Preferís algo más local? No hay problema: la parrilla libre es uno de los platos más pedidos, con asado, vacío, chorizo, morcilla, lechón y guarniciones bien caseras. Además, hay empanadas fritas, picadas gigantes, pastas caseras, cordero al disco y hasta pizzas para los más clásicos.

La experiencia de comer en La Uribeña

Sentarse en una de sus mesas de madera, mientras la brisa del campo cruza el salón abierto y los vasos de cerveza artesanal se van llenando sin apuro, es entrar en una cápsula del tiempo. El ambiente relajado, el aroma de la parrilla encendida y la música de fondo completan un cuadro costumbrista que enamora a los visitantes.

El servicio es amable, las porciones son generosas y los precios, accesibles: comer bien en La Uribeña cuesta alrededor de $8.000 por persona (julio 2025), incluyendo bebida artesanal y postre.

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Cómo llegar desde Buenos Aires

Desde la Ciudad de Buenos Aires, el trayecto es de alrededor de una hora y media en auto. El camino más directo es por la Autopista Riccheri, tomando luego la Ezeiza-Cañuelas. Al llegar a la rotonda de Cañuelas, hay que agarrar la Ruta 205 y girar a la izquierda en la Avenida Valeria de Crotto, que lleva directo al corazón de Uribelarrea. La Uribeña está justo al borde del pueblo, con su fachada de campo y su aroma a brasas inconfundible.