Un pan dulce distinto, pero con espíritu navideño

La base de esta receta es la harina de almendras, que aporta grasas saludables, textura y saciedad. El dulzor llega de manera natural gracias a las bananas maduras, evitando cualquier tipo de azúcar refinada o edulcorantes artificiales.

A eso se suman frutos secos, arándanos y especias que remiten directamente al sabor de las fiestas. No es un reemplazo triste del pan dulce tradicional: es otra versión, con identidad propia, pensada para quienes quieren cuidarse sin quedarse afuera del ritual.

Ingredientes simples y nutritivos

Con esta receta se obtienen hasta 8 porciones y el tiempo total de preparación ronda apenas una hora. Los ingredientes necesarios son:

• 200 g de harina de almendras

• 3 huevos

• 2 bananas maduras

• 150 g de arándanos frescos o secos

• 100 g de nueces picadas

• 50 ml de aceite de coco

• 1 cucharada de levadura química

• 1 cucharada de esencia de vainilla

• 1 cucharada de canela en polvo

• 1 pizca de sal

Todo se consigue fácilmente y no hace falta equipamiento especial, más allá de un molde y un horno.

Paso a paso: cómo hacerlo en casa

1. Preparar el horno
Precalentar el horno a 180 °C y engrasar un molde rectangular con un poco de aceite de coco para evitar que la mezcla se pegue.

2. Mezclar los ingredientes secos
En un bol grande, unir la harina de almendras, la levadura, la canela y la pizca de sal. Agregar las nueces picadas y mezclar bien para distribuirlas de manera pareja.

3. Armar la mezcla húmeda
En otro recipiente, batir los huevos hasta que estén apenas espumosos. Incorporar las bananas pisadas, el aceite de coco y la esencia de vainilla. Mezclar hasta lograr una crema homogénea.

4. Unir todo
Volcar la preparación húmeda sobre los ingredientes secos y mezclar suavemente con una espátula. Agregar los arándanos con cuidado para que no se rompan.

5. Hornear
Verter la mezcla en el molde y llevar al horno durante 30 a 35 minutos. El punto justo se logra cuando, al pinchar el centro con un palillo, sale limpio.

6. Enfriar y servir
Dejar enfriar por completo antes de desmoldar y cortar. Esto ayuda a que tome mejor consistencia y se pueda servir prolijo.

Cómo presentarlo en una mesa navideña

Aunque sea una versión saludable, la presentación también importa. Se puede decorar con ralladura de naranja o algunos arándanos extra por encima para darle un toque festivo. Acompañado de un café, un té o una infusión, funciona tanto como postre como para el desayuno del 25.

Conservación y practicidad

Una de las grandes ventajas de este pan dulce es que se conserva muy bien. Se puede guardar en un recipiente hermético en la heladera hasta por cinco días, o incluso congelarlo en porciones individuales para tenerlo listo en distintas comidas de las fiestas.

Variaciones posibles

La receta admite pequeños cambios sin perder su perfil saludable. Se pueden sumar pasas de uva o trozos de chocolate negro sin azúcar para darle un perfil más gourmet, siempre respetando la idea original de evitar azúcares refinados.

Por qué elegir esta versión

Cada porción aporta alrededor de 150 calorías, muy lejos de las aproximadamente 400 calorías del pan dulce tradicional. Esto lo convierte en una excelente opción para personas con diabetes, dietas bajas en carbohidratos o simplemente quienes buscan equilibrar los excesos típicos de fin de año.

En definitiva, este pan dulce saludable demuestra que comer rico en Navidad y Año Nuevo no tiene por qué estar reñido con cuidarse. Un clásico reinventado, más liviano, pero con todo el sabor y el clima de fiesta que pide diciembre.