El buñuelo vuelve a la gloria

Hay sabores que nos acompañan toda la vida. El de los buñuelos caseros es, sin dudas, uno de ellos. Crocantes, dorados y con un corazón verde o anaranjado, los buñuelos de verdura que hacían nuestras abuelas hoy vuelven a ganar protagonismo en la mesa porteña, en medio de un auge de recetas tradicionales, económicas y llenas de sabor.

Perfectos para acompañar una picada, una sopa o una cena liviana, los buñuelos de espinaca, acelga o zapallo tienen todo para convertirse en tus nuevos favoritos. Y lo mejor: no requieren grandes técnicas, ni ingredientes difíciles de conseguir. Solo ganas de cocinar y disfrutar.

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Una receta clásica con mil versiones

Los buñuelos de verdura tienen origen en la cocina criolla, pero también se nutren de influencias mediterráneas. Con el tiempo, se volvieron un clásico de las mesas argentinas, especialmente en otoño e invierno, cuando el cuerpo pide algo calentito y sabroso.

La receta base es simple, pero admite muchísimas variantes. Acá te dejamos una de las más queridas:

Ingredientes

• 2 tazas de harina

• 1 taza de leche

• 2 huevos

• 1 cucharadita de polvo de hornear

• 1 taza de espinaca cocida y picada (o acelga, zapallo, zanahoria rallada, etc.)

• Sal y pimienta a gusto

• Aceite para freír

Paso a paso

1. En un bol, mezclá la harina, el polvo de hornear, la sal y la pimienta.

2. Agregá los huevos y la leche, batiendo hasta formar una masa suave.

3. Incorporá la verdura cocida y picada. Mezclá bien.

4. Calentá aceite en una sartén profunda.

5. Con una cuchara, tomá porciones de masa y freílas hasta que estén doradas de ambos lados.

6. Retiralos y apoyalos sobre papel absorbente.

7. Servilos calientes... ¡y disfrutá!

Una experiencia para los sentidos

El aroma de los buñuelos recién hechos invade la cocina y despierta memorias. Su textura es clave: crocantes por fuera, esponjosos por dentro, con el sabor profundo de las verduras bien condimentadas. Combinan bien con una mayonesa casera, una salsita picante o simplemente con unas gotas de limón. Ideales para servir en tabla, como entrada o acompañamiento.