Si hay un destino que lo tiene todo para el amante del buen comer y el buen beber, ese es Mendoza. Con su Cordillera de fondo, viñedos interminables y una identidad gastronómica cada vez más refinada, esta provincia se posiciona como uno de los polos enoturísticos más importantes del país. Y ahora, para los que quieren recorrerla sin manejar, existe una opción cómoda, segura y pensada para el disfrute sensorial: el Bus Vitivinícola.

Este colectivo turístico con modalidad Hop On & Hop Off conecta la Ciudad de Mendoza con las principales bodegas de la región. ¿La propuesta? Subirse en una de las 25 paradas urbanas y descender en cada bodega para degustar, recorrer y saborear todo lo que la tierra mendocina tiene para ofrecer. Ideal para quienes buscan una experiencia completa sin preocuparse por el volante.

Ocho días, ocho rutas gourmet

Cada día de la semana tiene su propio circuito temático. Desde el "Camino del Vino y Olivos de Maipú" los lunes, hasta el "Luján de Cuyo Tierra Malbec" los jueves, o el "Valle de Uco Sur" los miércoles. Cada ruta ofrece su selección de bodegas, productos orgánicos, viñedos boutique y restaurantes que exaltan la cocina regional.

A bordo, un coordinador bilingüe acompaña a los pasajeros, ayuda a organizar las visitas y sugiere experiencias gastronómicas según los intereses de cada grupo. No es sólo un transporte: es un tour curado, pensado para vivir el vino y la comida con todos los sentidos.

Aceites premium y cocina local: paradas obligadas

Entre las experiencias más destacadas se encuentra Zuelo, un olivar orgánico en Maipú donde se producen aceites de oliva virgen extra bajo estándares de altísima calidad. Su entorno de monte nativo y prácticas agrícolas sustentables invitan a conectar con lo esencial: cosechar aceitunas, recorrer la finca y degustar el aceite en su versión más pura. Ideal para los fans del producto local bien hecho.

A pocos kilómetros, la Bodega Familia Zuccardi combina historia, vinos premiados y una propuesta gastronómica que emociona. Con etiquetas como Santa Julia y una carta que marida cada plato con el varietal perfecto, es una parada imperdible. Desde empanadas al horno de barro hasta carnes al Malbec, todo está pensado para celebrar el terruño.

¿Cómo funciona el Bus Vitivinícola?

• Origen: Sale desde la Ciudad de Mendoza

• Zonas que recorre: Maipú, Luján de Cuyo, Valle de Uco, Guaymallén

• Modalidad: Subí y bajá libremente en las paradas designadas

• Entradas: Un solo ticket por día, con posibilidad de armar tu itinerario

• Incluye: Coordinador bilingüe y asistencia en visitas a bodegas

Además de facilitar el acceso a bodegas tradicionales y gourmet, este sistema promueve el consumo responsable, impulsa la economía local y hace más accesible el universo del vino para quienes viajan sin auto.

¿Por qué elegir esta experiencia?

Porque no es solo vino. Es historia, es cultura y es comida. Es sentarse frente a la Cordillera con una copa de Malbec y una tabla de quesos artesanales. Es probar un aceite recién prensado o un plato regional en su punto justo. Es viajar sin apuro, con los sentidos despiertos y el paladar listo para sorprenderse.