Una receta simple, sabrosa y con alma de escapada

Las brochettes de carne y verduras al horno son esa receta comodín que siempre funciona. Tienen el encanto de lo casero, se adaptan a lo que tenés en la heladera, y con un toque de hierbas frescas y buena cocción, se transforman en un plato que grita "hecho con amor".

Si estás planificando una escapada gastronómica por Buenos Aires o simplemente querés viajar con el paladar desde casa, esta receta es para vos. Ideal para preparar en un quincho, en la cocina del depto o incluso en una cocina equipada de alguna cabaña serrana.

Ingredientes con sabor local

Los ingredientes son simples y fáciles de conseguir en cualquier verdulería o carnicería de barrio:

• Carne de paleta en cubos grandes

• Panceta

• Morrón rojo, verde y amarillo

• Cebolla y cebolla morada

• Tomates perita

• Manteca

• Romero, tomillo, orégano y ají molido

La clave está en la combinación de colores, texturas y aromas: el dulzor del morrón, el toque ahumado de la panceta y esa manteca de hierbas que se derrite en el horno y lo perfuma todo.

Paso a paso: cómo preparar las brochettes en casa

1. Cortar todo en cubos grandes: carne, panceta y verduras.

2. Armar las brochettes: intercalando los ingredientes para que haya variedad en cada pincho.

3. Preparar la manteca de hierbas: derretí la manteca a fuego bajo y sumale las especias.

4. Sellar las brochettes en una sartén con oliva por 2 o 3 minutos por lado.

5. Llevar al horno: en una fuente, pincelalas con la manteca y cociná a 180°C entre 15 y 20 minutos.

6. Servir bien caliente, con alguna guarnición rica.

Tip gourmet: Si usás palitos de madera, dejalos en agua 30 minutos antes para que no se quemen.

Opciones para personalizar la receta

• ¿Más vegetales? Sumale champiñones, calabacín o berenjena.

• ¿Más liviano? Reemplazá la panceta por pollo o cortes magros de carne.

• ¿Más sabor? Mariná la carne 1 o 2 horas antes con oliva, limón y especias.

• ¿Más acompañamiento? Probá con arroz especiado, papas crocantes o una ensalada fresca.

Comer con todos los sentidos

El aroma a hierbas recién horneadas, los colores vibrantes de los vegetales, el dorado tentador de la carne sellada... Cada bocado tiene algo especial. Las brochettes son un plato que entra por los ojos, pero se disfruta con todos los sentidos. Además, se pueden comer con la mano, lo que las hace perfectas para comidas informales o al aire libre.