Un rincón de Miami en el corazón de Buenos Aires

La escena de restaurantes en Buenos Aires no deja de reinventarse, y Brickell Café es prueba de ello. Con una estética inspirada en las playas de Miami, este espacio propone desconectar de la rutina porteña sin salir de la ciudad.

La decoración combina madera clara, vegetación natural y ventanales amplios que llenan el salón de luz. Hay mesas comunitarias para los que llegan con la notebook, boxes privados para encuentros tranquilos y un living que invita a quedarse. Afuera, el deck se convierte en un imán para quienes buscan aire libre y buena vibra.

Smoothies y jugos para recargar energía

Uno de los pilares de la propuesta es su barra de bebidas frescas. Acá, los smoothies proteicos y los jugos cold press son los favoritos de quienes buscan opciones nutritivas y llenas de sabor.

Entre los más elegidos están el Gainz (frutos rojos, yogur griego y miel), el Detox Super Greens (ananá, menta y limón) y el Red Fuel (zanahoria y jengibre). A ellos se suman cafés de especialidad y clásicos de cafetería para acompañar cualquier momento del día.

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Platos que equilibran lo rico y lo saludable

La carta gastronómica juega con contrastes: fresca, creativa y con mucho color. Las ensaladas son protagonistas, con combinaciones como la Marroquí, que lleva cous cous, halloumi, palta y huevo mollet, o la Kale Caesar, con pollo y croutones de masa madre.

Si la idea es algo más contundente, los sándwiches y wraps de autor cumplen el antojo: tataki de atún rojo en pan ciabatta con alioli picante y pickles, o un wrap de salmón picante con porotos, palta y aderezo de cilantro. Y para picar, nada mejor que los "antojitos" como hummus de hongos o tartar de salmón con chips de batata.

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Brunchs con identidad propia

Si hablamos de gastronomía porteña, el brunch ya es un ritual. En Brickell Café, la propuesta combina clásicos con un giro moderno. El avocado toast en pan de masa madre, la tostada de salmón ahumado con crema ácida y pickles o el açaí bowl con frutas y granola son algunos de los más pedidos.

Todo se complementa con su café insignia, el Flat Brickell, un doble espresso con almíbar de haba tonka que ya se ganó un lugar entre los favoritos de la casa.

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Dulces para todo momento

La pastelería artesanal completa el menú y tiene opciones para cada antojo: desde croissants y cookies rellenas hasta versiones más saludables como banana nut bread o barritas proteicas. Ideal para una merienda después del trabajo o para acompañar el café del día.

Dónde queda Brickell Café

Ubicado en Soler 6048, Brickell Café se posiciona como una de las aperturas más atractivas de la ciudad. Su fusión de estética playera, cocina fresca y ambiente relajado lo convierte en un espacio ideal para desayunar, almorzar, merendar o simplemente disfrutar de un café con algo dulce.

Si sos de los que siempre buscan dónde comer en Buenos Aires y descubrir nuevas experiencias, Brickell Café es un destino que combina diseño, sabor y bienestar en cada detalle.