29/05/2025

turismo

Los Antiguos: el secreto mejor guardado de la Patagonia

A orillas del Lago Buenos Aires y con los Andes como telón de fondo, Los Antiguos se presenta como una propuesta distinta dentro del mapa turístico patagónico. Este pueblo de Santa Cruz, reconstruido tras la erupción del volcán Hudson, combina mística tehuelche, aire puro y actividades al aire libre en un entorno casi intacto por el turismo masivo. Ideal para quienes buscan una escapada auténtica, sin filtro.

Un pueblo con alma en el sur profundo

En el rincón noroeste de Santa Cruz, justo donde Argentina casi se funde con Chile, aparece Los Antiguos, un lugar que parece detenido en el tiempo. Lejos del turismo clásico de El Calafate o Bariloche, esta localidad a orillas del Lago Buenos Aires sorprende por sus paisajes vírgenes, su historia profunda y un silencio que se agradece.

La postal es perfecta: un lago inmenso de aguas turquesa, montañas con picos nevados, glaciares que se reflejan como espejos y un cielo amplio que invita a respirar hondo. Pero lo más fascinante es cómo la historia y la naturaleza se entrelazan: las tierras que hoy pisan los visitantes fueron elegidas por los pueblos tehuelches como lugar de descanso eterno, lo que aporta una energía única al ambiente.

Una historia marcada por la fuerza y la reconstrucción

En 1991, la erupción del volcán Hudson cubrió de cenizas gran parte de la región. Lejos de desaparecer, Los Antiguos resurgió con fuerza, cambiando la ganadería por el turismo y la producción de cerezas. Esa transformación se siente en cada rincón, con gente cálida y resiliente que hoy abre sus puertas a viajeros curiosos.

El pueblo fue creciendo en servicios sin perder su esencia. Hoy, es común ver viajeros con mochilas mezclados con pescadores locales, o familias disfrutando de un picnic a orillas del lago mientras el viento patagónico silba entre los álamos.

Los Antiguos representa un tesoro escondido en el noroeste santacruceño.

Qué hacer en Los Antiguos

Para quienes buscan experiencias auténticas, Los Antiguos ofrece un menú variado que no necesita lujos para dejar huella:

  • Navegar el Lago Buenos Aires, uno de los más grandes de Sudamérica, con vistas imponentes y la posibilidad de ver glaciares desde el agua.

  • Practicar kayak, pesca deportiva y windsurf en un entorno puro y silencioso.

  • Caminar entre tumbas tehuelches, testimonio vivo de una cosmovisión ancestral.

  • Hacer senderismo o recorridos en bicicleta por paisajes que parecen salidos de una postal.

  • Recorrer el circuito histórico del pueblo, desde su pasado ganadero hasta la actualidad.

  • Cruzar a Chile por el Paso Jeinimeni, para sumar una aventura más en el mismo viaje.

Cómo llegar

Desde Caleta Olivia, el camino hacia Los Antiguos implica un viaje de casi 920 kilómetros, atravesando pueblos como Pico Truncado, Las Heras y Perito Moreno, con rutas escénicas que ya forman parte de la experiencia. El tramo final, por la Ruta 43, ofrece vistas que hacen que el viaje valga cada kilómetro.

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