Torta de mandarina exprés: sabor a historia y hogar en cada bocado

El invierno en Buenos Aires tiene su propio ritmo: calles tranquilas, olor a leña en los barrios y hornos encendidos en las casas. Entre las recetas que resurgen en esta época, la torta de mandarina exprés se destaca por su sencillez, sabor y una historia que conecta generaciones.

De origen italiano, esta preparación llegó a nuestras tierras en las valijas de los inmigrantes del siglo XX. Con el tiempo, se fue adaptando a los ingredientes locales y al paladar argentino, hasta convertirse en una fija en muchas casas porteñas.

Una receta que viajó desde Italia y encontró su lugar en Buenos Aires

Las primeras versiones de esta torta nacieron en pequeños pueblos del sur de Italia, donde el cítrico era protagonista en la repostería casera. Al llegar a la Argentina, las familias la reformularon con ingredientes accesibles: mandarinas frescas del mercado, harina común, un solo huevo y azúcar.

Hoy, sigue siendo una receta rendidora, ideal para quienes buscan algo rico y casero sin complicarse demasiado.

¿Cómo se hace esta torta exprés?

Ingredientes básicos:

• 3 mandarinas (con cáscara, sin semillas)

• 2 tazas de harina leudante

• 1 huevo

• 200 gramos de azúcar

Paso a paso:

1. Precalentá el horno a 180°C.

2. Licuá las mandarinas enteras (sí, con cáscara) hasta que queden bien integradas.

3. En un bowl, batí el huevo con el azúcar hasta que quede una mezcla espumosa.

4. Sumá de a poco la harina leudante, alternando con la mandarina licuada, hasta obtener una mezcla homogénea.

5. Verté la preparación en un molde previamente enmantecado.

6. Horneá durante 35 minutos. Para comprobar que está lista, pinchala con un escarbadientes: si sale seco, ¡ya está!

7. Dejala reposar 10 minutos antes de desmoldar. Espolvoreala con azúcar impalpable para un toque final.

La combinación perfecta: mate y torta tibia

Ideal para una merienda de domingo o para esos días grises en los que necesitás un mimo, esta torta es esponjosa, húmeda y tiene un aroma cítrico irresistible. No hace falta ser chef para prepararla: lo mejor de todo es que podés hacerla en menos de una hora, con ingredientes que seguro tenés en casa.

El maridaje estrella es, sin dudas, el mate. Pero también acompaña muy bien un café con leche o una infusión de hierbas. Si querés subir la apuesta, podés agregarle chips de chocolate, un glaseado cítrico o incluso servirla con una bocha de helado de crema americana.