La fiebre de las cookies llegó para quedarse

Lo que empezó como un simple bocado dulce hoy es una obsesión global. Y la gastronomía porteña lo adoptó sin rodeos. En Buenos Aires conviven estilos, técnicas y "escuelas" que defienden recetas casi como manifestos: finas y crocantes, altas y casi crudas por dentro, con manteca derretida o pomada, con azúcar blanco, rubio o mascabo. Cada cocinero tiene su fórmula ideal... y las redes sociales hicieron el resto.

Mientras tanto, la receta viajó por el mundo y se adaptó a cada ciudad. Acá ya encontramos cookies gigantes para compartir, mini para acompañar un café y versiones veganas o inspiradas en postres emblemáticos. El Día de la Cookie solo funciona como excusa: en Buenos Aires ya son protagonistas todo el año.

Croque Madame Palacio Paz: elegancia y pistacho en Retiro

En Retiro, dentro del imponente Palacio Paz, Croque Madame sumó una cookie de pistachos que se volvió un imprescindible de su merienda premium. La propuesta combina una masa suave con una superficie levemente crocante, un corazón húmedo y un relleno de chocolate blanco que aporta cremosidad. El pistacho en trocitos termina de equilibrar dulzor, aromas y notas tostadas.

Se puede disfrutar a toda hora, en el salón o en el jardín del palacio, acompañada de infusiones y pastelería hecha de manera artesanal. Una parada perfecta para quienes buscan restaurantes en Buenos Aires con encanto histórico.

Bilbo Café: cookies artesanales para acompañar café de especialidad

En varias zonas de la ciudad, Bilbo Café propone una carta de cookies pensadas para realzar su café de especialidad. Cada una tiene personalidad propia: la Lime suma frescura cítrica; la Marroc de Pistacho apuesta por textura y dulzor; la de naranja y chocolate combina un toque intenso con ganache de avellanas; y la versión vegana sorprende con cacao profundo y un suave toque de sal marina.

Todas están hechas en casa y son ideales para una merienda golosa o para sumar a cualquier pausa del día.

Restaurant Museo Evita: cookies caseras en una casona con historia

En el corazón de Palermo, dentro de una casa de 1923, el Restaurant Museo Evita ofrece cookies recién horneadas que se integraron a la perfección con sus clásicos dulces. Sus variedades -chocolate, chocochips y red velvet- pueden pedirse por unidad o en degustación.

La de chocolate se caracteriza por su humedad y capa de azúcar impalpable; la chocochips respeta la receta clásica con chips abundantes y aroma a manteca; y la red velvet suma un toque de frutos rojos y gotas de chocolate blanco. Todo se disfruta mejor en su patio, rodeado de historia y verde.

Ciro: cookies para celebrar (y combinar con helado)

Ciro apuesta por una línea pensada para celebraciones dulces. Entre sus opciones destacan la red velvet con centro cremoso de frosting, la de limón y pistacho con ganache de chocolate blanco, y la Matilda, inspirada en la icónica torta de chocolate y terminada con ganache de dulce de leche.

Su menú también incluye cafés, licuados, milkshakes y una tentación que ya es marca registrada: vasos hechos de masa de cookie, rellenos con chocolate y frutos secos. Se pueden combinar con helados artesanales como dulce de leche tentación, vainilla o mascarpone con frutos rojos.

La Terraza de La Carbonera: chocolate intenso en San Telmo

En San Telmo, La Terraza de La Carbonera ofrece una cookie de chocolate que se volvió una de las favoritas de su carta. Tiene un exterior crocante y un interior suave, elaborado con cacao de alta calidad que realza el sabor. Se puede acompañar con cafés aromatizados o bebidas frescas como limonada con miel y jengibre.

El espacio vidriado del lugar, bañado en luz natural, crea un ambiente cálido y relajado para hacer una pausa dulce dentro del barrio.

Gontran Cherrier: cookies francesas con sello pastelero

La boulangerie francesa Gontran Cherrier también sumó su propia versión del hit del momento. Ofrece dos cookies elaboradas a base de una masa de vainilla: una combina pistachos con chips de chocolate blanco; la otra tiene un centro de Nutella con frutos secos, ideal para quienes buscan algo más goloso.

Son opciones versátiles que funcionan tanto con un café de media tarde como de cierre dulce después de comer en cualquiera de sus locales.

El paseo más dulce de Buenos Aires

La escena de las cookies en la ciudad demuestra que este clásico se reinventó y ya forma parte de la identidad de la gastronomía porteña. Desde propuestas elegantes hasta versiones creativas y golosas, Buenos Aires ofrece opciones para todos los gustos y estilos. Un recorrido ideal para quienes buscan dónde comer en Palermo, Retiro, San Telmo o simplemente quieren descubrir un nuevo antojo entre cafeterías y restaurantes.