El regreso más sabroso del año: La Casa Blanca de Habana renace en Villa Pueyrredón

Quienes vivieron su adolescencia o juventud en los años 90 en Villa Pueyrredón seguro recuerdan La Casa Blanca de Habana, una de las pizzerías más queridas del barrio. Hoy, el cartel original vuelve a brillar en la esquina de Nazca 4301, pero con una propuesta renovada que conquista tanto a nostálgicos como a nuevas generaciones de amantes de la buena pizza porteña.

La reapertura se concretó en septiembre de 2025 gracias al impulso de dos vecinos de toda la vida: Walter García Díaz y Martín Coiro. Juntos recuperaron este ícono local y lo transformaron en un verdadero templo pizzero, con cocina artesanal, productos seleccionados y una ambientación que homenajea su historia sin perder de vista lo contemporáneo.

Pizza a la leña, masa madre y alioli en los bordes: el sello de la casa

La estrella de La Casa Blanca de Habana es, sin dudas, su pizza. Cocida en un horno de piedra 100% a leña -con quebracho blanco y rojo- construido a medida por un artesano, las pizzas se preparan a la vista, sobre una masa con fermentación lenta de 48 horas y harina tipo napolitana. El toque final que las hace inolvidables: alioli casero pincelado en los bordes para un plus de sabor.

El menú presenta dos líneas bien definidas: las tradicionales, como muzzarella, fugazzeta y napolitana; y las especiales, con combinaciones gourmet como:

• Stracciatella: base blanca con crema, calabaza asada, hongos, tomates confitados y hierbas.

• Mortadella con pistacho: salsa de tomates casera, mozzarella, ricotta, maní tostado y pesto de albahaca.

• Bresaola: crema de ajo crocante, mozzarella y almíbar cítrico con un toque picante.

• Azul: base de crema, mozzarella y cebollas caramelizadas y de verdeo.

También hay opciones veganas y sin TACC, pensadas para quienes buscan alternativas sin gluten.

Más que pizza: picadas, fainá creativo y torta de ricota de la nona

Antes de lanzarse a las pizzas, vale la pena explorar la sección "Para picar", donde brillan el lehmeyún casero (empanada armenia) con receta familiar, el pan de pizza con alioli y porciones de fainá gourmet, con toppings como cebolla caramelizada y queso reggiano, o tomates confitados con rúcula.

¿Dulce? La torta de ricota de la nona Elena, servida con mandarinas confitadas a la leña, es un viaje a la infancia. También se ofrece un budín de pan de masa madre con dulce de leche y crema que cierra cualquier comida con moño.

Bebidas con identidad propia

Además de vinos por copa o botella, cervezas y cócteles clásicos, La Casa Blanca de Habana cuenta con su propia etiqueta de moscato joven llamado Momenti, disponible también en dos versiones de cócteles refrescantes: el Moscatoni (con Sprite y limón) y el Momenti Spritz (con agua tónica y limón). Ideal para acompañar una buena porción y brindar por el barrio.

Un ambiente que respira barrio

El local fue totalmente renovado pero conserva guiños entrañables: el cartel original, cerámicas ilustradas, antiguas pizzeras colgando del techo. La decoración combina lo clásico y lo actual, con iluminación cálida, materiales nobles y mesas tanto en salón como en vereda. El ambiente es relajado y familiar, pensado para compartir momentos.

La atención es cercana y personalizada. Y si vas a pedir take away, te explican cómo recalentar la pizza en casa sin que pierda textura ni sabor. Un detalle más que demuestra el cuidado con el que trabajan.

Dónde y cuándo

Dirección: Nazca 4301, Villa Pueyrredón
Horarios: Martes y miércoles de 19 a 23:30 h. Jueves a domingos de 20 a 00 h.
Instagram: @lacasablancadehabana