Dos paradas clave para los fanáticos de las empanadas en Buenos Aires

En la Ciudad de Buenos Aires, la búsqueda de las mejores empanadas es una aventura deliciosa. Ya sea para turistas que pisan por primera vez suelo porteño o locales que quieren salir de la rutina, hay dos lugares que vale la pena descubrir si se quiere probar una empanada diferente. Desde hornos de barro hasta fusiones exóticas, estas dos propuestas te invitan a vivir una experiencia culinaria con identidad, historia y creatividad.

Aire Libre (Belgrano): horno de barro, empanadas de cordero y paz entre plantas

Belgrano es mucho más que Barrio Chino o cafés con brunch: esconde espacios donde la calma y el sabor se encuentran. Aire Libre es uno de ellos. Ubicado sobre la Avenida del Libertador al 6300, este restaurante sorprende por su estética relajada, rodeada de vegetación, y por su cocina que respeta las raíces sin dejar de lado la sofisticación.

Su carta tiene platos que van desde una trucha curada con papas al natural hasta pastas artesanales, pero las verdaderas protagonistas son sus empanadas de cordero y humita, cocidas en horno de barro. La textura crocante, el aroma del horno y el sabor profundo de sus rellenos las convierten en una parada obligada para quienes buscan empanadas con alma.

Dónde queda: Av. del Libertador 6327, Belgrano
Horarios: Martes a sábados de 12 a 00; domingos de 10 a 19
Cómo llegar: Colectivos 15, 29, 42, 107, 130 - Tren Mitre (estación Belgrano C)

Punto Mona (Chacarita): empanadas de langostinos, luces bajas y tragos de autor

En el corazón de Chacarita, dentro de un galpón reciclado con luces tenues y buena música, se esconde Punto Mona. No solo es un restaurante, es una experiencia. Con la reconocida Mona Gallosi al frente de la barra, este espacio combina una cocina creativa con coctelería de primer nivel.

Las empanadas acá tienen un giro inesperado: la estrella es la versión de langostinos con leche de coco, jengibre y jalapeño, una explosión de sabores que demuestra que la tradición también puede reinventarse. La carta continúa con platos como gnudi de ricota con crema de hongos y sándwich de entraña en baguette, todo pensado para compartir y sorprender.

Y si hablamos de tragos, la propuesta es igual de osada. Desde el Gaucho (con whisky, cedrón y vermut) hasta el Agua de Vida (vodka, pera y Grand Marnier), cada cóctel cuenta una historia.

Dónde queda: Fraga 93, Chacarita
Cómo llegar: Colectivos 19, 39, 93, 108, 111

Comer empanadas en Buenos Aires: algo más que una tradición

Estas dos propuestas demuestran que la empanada argentina puede tener muchas vidas: puede ser rústica y cocida en horno de barro, o sofisticada y exótica, con ingredientes inesperados. Aire Libre y Punto Mona son dos formas distintas de honrar esta receta tan nuestra, con identidad, sabor y una experiencia que va más allá del plato.

Si estás buscando nuevas experiencias gastronómicas en la ciudad, sumá estas direcciones a tu mapa. No solo vas a comer bien: vas a vivir Buenos Aires a través de su comida.